Nuestros aperos funcionan mediante un sistema hidráulico, una elección estratégica que ofrece numerosas ventajas, detalladas a continuación:
- Potencia elevada: Los sistemas hidráulicos ofrecen una gran potencia de salida en comparación con su tamaño y peso.
- Versatilidad: Pueden adaptarse a sistemas rotativos o lineales.
- Control preciso: Los sistemas hidráulicos permiten un control muy preciso del movimiento mediante el control del flujo y la presión. Esto genera en una fuerza y velocidad del sistema muy precisas.
- Reversibilidad: Control bidireccional del sistema.
- Fiabilidad: Los sistemas hidráulicos son conocidos por su fiabilidad, con muy pocos fallos reconocidos.
- Durabilidad: Los componentes hidráulicos suelen diseñarse para resistir ambientes corrosivos con un mantenimiento menor en comparación con un sistema mecánico.
- Eficiencia energética: La transferencia de energía se logra fácilmente gracias a los conductos hidráulicos.
- Mantenimiento: Menor necesidad de mantenimiento en comparación con un sistema mecánico.